Apartó un momento la vista del tejido para mirar por la ventana.
—Lautaro.
—¿Qué?
—Nomeolvides.
Con una sonrisa, él volvió a su crucigrama y completó la nueve vertical. Nunca.
Apartó un momento la vista del tejido para mirar por la ventana.
—Lautaro.
—¿Qué?
—Nomeolvides.
Con una sonrisa, él volvió a su crucigrama y completó la nueve vertical. Nunca.